2017 Diciembre, viaje de fin de año con entrega de incentivos y premios. Escuela de El Cachi.
07-12, Escuela n° 1048, El Cachi:
En esta escuela acababan de terminar el ciclo lectivo, ya que llegamos cerca del mediodía del último día de clases de este año. Toda la Comunidad presente, esperándonos con un lindísimo espíritu, propio de esta querida gente: Eugenia, maestra del nivel Inicial; Esteban, el director y maestro de 2° Ciclo del Primario; Ricardo, maestro del 1° Ciclo de este mismo nivel; todos los alumnos de Inicial y Primario, y varios del Secundario que estudian en otros establecimientos; doña Noris, la cocinera; muchas mamás y papás de los chicos… y nos sumamos Germán, titular de la fundación, Raúl y Edu.
Por la hora en que llegamos, primero organizaron el almuerzo. Estuvieron preparando para compartir con nosotros unos pollos, ensalada y pizas, todo hecho en el horno de barro de la escuela por varios papás y doña Noris. Bajo los árboles armaron las mesas para tener un poco de sombra, ya que hacía mucho calor ese día (46° C, más la sensación térmica), propio de esa época en Santiago del Estero.
La escuela es un edificio que tiene muchos años, que desde hace dos años está siendo renovado, y como todo el paraje donde está, no tienen electricidad, por lo que necesitan utilizar el agua del aljibe para la preparación de la comida, el lavado de los utensilios, el uso de los sanitarios y demás cosas, ya que no pueden utilizar el agua a través de la red de cañería, por carecer de energía necesaria y de bomba para subir el agua a los tanques. La escuela tiene pantallas solares, pero no funcionan. Utilizan motores para generar electricidad cuando lo necesitan.
Han podido desarrollar los alumnos las actividades educativas en pos de alcanzar los objetivos de cada grado, contando con los recursos para esto.
El aporte de la fundación en alimentos, útiles y elementos de higiene sigue siendo necesario para que los chicos y docentes cuenten con los recursos para seguir alcanzando una educación digna.
Luego, entregamos los distintos premios e incentivos de parte de la fundación, muy esperados por todos:
7 linternas para los alumnos del Primario que tuvieron mejor asistencia durante el año
3 pares de zapatillas para los chiquitos de Inicial, que es generalmente un regalo para motivación del grupo
7 pares de zapatillas para los alumnos del Primario que mayor esfuerzo hayan manifestado en la cursada.
12 pares de zapatillas para los alumnos del nivel Secundario que acompañamos a través de Selva, la directora de esta escuela, brindándoles los útiles que necesitan para poder estudiar y desarrollar sus clases.
3 bicicletas para los mejores promedios del nivel Primario.
22 Bolsas navideñas para las familias de los alumnos y de los docentes.
22 pesebres.
Uno de los docentes dijo unas palabras en nombre de la comunidad agradeciendo el apoyo de la fundación. Una mamá nos habló a todos destacando la importancia del acompañamiento de la fundación para los alumnos de todos los niveles, y de lo valioso de la cercanía de nuestra organización con todos los miembros de la comunidad educativa. Nos hicieron unos presentes con fotos y nos regalaron algún que otro animal que crían en sus casas para que lo compartamos con el equipo de la fundación, y algunas tortillas para que tomemos mate.
Cerrando el año con una fiesta esa noche, la escuela quedaba cerrada ya desde ese fin de semana, dado que los chicos no necesitaron hacer ningún tipo de recuperación de materias.
Con el deseo de seguir juntos nos despedimos hasta febrero del año que viene.
