2018 Octubre, con los Trashumantes de Dique Luján en el Jardín Mis Huahuitas, del Barrio Sarmiento,
En el Jardincito Mis Huahuitas, de La Banda, con los Trashumantes de Dique Luján.
El jueves 25 de octubre Lila, Jorge y Sergio del grupo Trashumante, y Raulito y Edu de la fundación, cruzamos el río Dulce para ir de la Ciudad de Santiago a la de La Banda. Llovía un poco esa mañana temprano, pero llegamos sin problema al Barrio Sarmiento.
La tarde anterior fuimos desde Colonia Simbolar al Santuario de Santa Rita, situado en el Barrio Jorge Newbery, de Santiago Capital, donde el párroco, el padre Walter, nos recibió y generosamente nos ofreció las instalaciones de la casa parroquial para que el grupo de Trashumantes y Edu pudiesen hacer noche, cenar y descansar ahí, para renovar fuerzas y preparar el encuentro del día siguiente. Muy pero muy agradecidos por este recibimiento y el compartir tan generoso de parte del párroco y su Comunidad.
Al llegar al Jardín Mis Huahuitas nos encontramos con la gran amabilidad de Yannette, docente y directora de la institución. Mostró a los visitantes las instalaciones, fuimos saludando a los chiquitos que estaban y a las mamás. La invitación fue hecha para toda la comunidad educativa, que respondió yendo en gran número, tanto niños como adultos.
Los Trashumantes fueron tomando contacto con todos y cada uno, haciéndolos sentir muy bien, y acondicionando la Salita donde siempre tienen sus clases los alumnitos, y cuando llegaron la mayoría de los chicos y sus familias, comenzamos la jornada preparada para la gente del lugar.
Pudimos participar todos de la apertura de clases izando la bandera con varios trozos de canciones que fueron acompañando este acto, y con cantos y movimientos de parte de la Seño y de los niños, que realizan todas las mañanas al iniciar las clases.
Volvimos todos a la Salita, y ahí Lila y Sergio tomaron la posta en esta parte de las actividades, con una intriga y asombro de parte de quienes estábamos en el Jardincito. Al ir avanzando el tiempo, mediado por los que los Titiriteros hacían, chicos y grandes nos fuimos soltando, y siempre con mucha alegría nos sumamos a las distintas propuestas.
En total había alrededor de 30 niños, entre alumnitos y algunos hermanitos, quienes se manifestaron de maneras expresivas, muy cariñosos y afectivos, acercándose a saludarnos con mucha soltura, buscando abrazos y besos; las mamás y papás también tenían una actitud de muy buena predisposición.
Los chicos tenían mucha curiosidad, interesados por saber quiénes fueron a visitarlos, cómo se llamaban los personajes, saber que había en los bolsos y valijas.
Mantas: se utilizaron para presentarse y contar de dónde venían los visitantes.
Títeres: Elda Pacheco y Lobolito, los elegidos para comunicarse con la comunidad y poder dialogar con los chicos.
Susurradores: se utilizaron para acercarse a todos, diciendo a través de ellos cosas lindas al oído.
Acariciadores: técnica que permite brindar una caricia a todos los participantes que quieran recibirla.
Sombrillas: se utilizan para que, poniéndose bajo la sombrilla y cerrando los ojos, se pueda pensar en los sueños que se tiene en la vida.
Poncho del miedo: una narración que a través del poncho ayuda a pensar en las personas que nos pueden quitar los miedos, con una cercanía amorosa. En especial se dirigieron a los niños, para que vivan sin temores, ayudados por los adultos que les brindan seguridad.