2019 Marzo, en el colegio parroquial de Suncho Corral, comenzando las clases...

En el viaje de febrero confeccionamos con los docentes y directivos de cada escuela la lista de necesidades para que los chicos tengan todo lo necesario para el comienzo de clases. Luego solicitamos a los proveedores, que generalmente nos venden la mercadería, que nos pasen sus listas de precios. Hicimos una comparación detallada de los presupuestos, y elegimos comprarle tal o cual producto al que nos venda más barato.

Luego de tener claro a quién comprar cada cosa, basados en lo pedido por todas las escuelas, compramos a los mayoristas enviándoles las notas de pedido. Nos entregan la mercadería o la retiramos del local, para luego armar los paquetes para cada escuela según lo que hayan solicitado. Se les abonan lo facturado para el registro administrativo, y luego se lleva a cada Comunidad educativa lo comprado, llenando con ellos el remito de entrega detallado, que ellos firman y sellan para poder controlar. Por cuestiones climáticas, desde el 12 de marzo se reparten todo lo pedido a cada escuela, casi al inicio del ciclo lectivo.

Las compras las realizamos en Suncho Corral, por una cuestión de logística, ya que están ahí los proveedores y el lugar donde llevamos la mercadería para armar lo que llevaremos a cada escuela.

Para poder adquirir lo necesario para los chicos, los socios de la fundación aportan el dinero, y a esto se suman las donaciones que conseguimos. A fin de este mes saldremos a buscar donantes para poder sumar más alumnos que sostengamos en su estudio, agregando escuelas a nuestro proyecto.

Con 6 personas que aporten $ 200 por mes, sumamos un alumno a ayudar. Esperamos que tu espíritu solidario ya te lleve a pensar en ese pequeño grupo que junto a vos, permitan ir sumando a más chicos de Santiago del Estero a poder seguir estudiando dignamente.

Colegio parroquial de Suncho Corral:

Daniela y Graciela, secretaria y directora del colegio, lo recibieron a Raulito, que les entregó todo lo que solicitaron les llevemos, y armarán los paquetes para cada niño, y así se los pueden ir llevando sus familias para poder estudiar. Agradecieron con mucho énfasis lo que les compramos para los chicos, y lo pronto de la entrega de este material, con el que los alumnos pueden comenzar sus clases con todo lo necesario.

Están recibiendo todos los días el pan para la merienda que aportamos desde la fundación, y les entregamos los útiles y material didáctico para los 40 alumnos de las familias más carenciadas de esta Comunidad educativa. Comenzaron las clases los primeros días de marzo.